Si estás pensando en reformar tu cocina y tienes dudas sobre cual es la distribución que mejor quedaría para aprovechar al máximo el espacio y conseguir la mayor funcionalidad en tu cocina.

Para escoger adecuadamente la distribución de la cocina es importante tener en cuenta el espacio disponible, el estilo de decoración, tu estilo de vida, el número de personas en la casa… Sabiendo todo esto podremos distribuir nuestra cocina correctamente.

1. Cocinas en U. Esta distribución usa 3 paredes, y el frigorífico, fregadero y placa de cocción forman un triángulo equidistante. Para esta distribución necesitaremos un espacio más bien amplio, pero garantizaremos una buena movilidad de todas las personas que estén trabajando en la cocina.
2. Cocinas en L. Esta distribución emplea 2 paredes adyacentes, por lo que hay que tener en cuenta donde se colocan el frigorífico, fregadero y zona de cocción para que haya espacio suficiente sin que las personas en esas zonas se impidan el paso. Estas cocinas son ideales tanto para espacios grandes como pequeños y nos deja algo de espacio para poder situar una zona para comer.
3. Cocinas Lineales. Perfecta para espacios pequeños o estrechos ya que solo aprovecha una pared. Lo ideal es que la pared no tenga ventanas o paredes para aprovechar mejor el espacio y colocar armarios en la parte superior.
4. Cocinas con isla. Son cocinas en las que se sitúa una isla en la zona central. Son perfectas para recibir familiares o amigos ya que facilita la comunicación. Descubre más sobre cocinas con isla.
5. Cocinas con península. La distribución se basa en disponer las áreas de trabajo perpendiculares en la pared. Sus diseños son muy variados y también permiten una buena comunicación entre cocina y salón o comedor.
6. Cocinas en paralelo. Los espacios de trabajo se encuentran en paredes opuestas dejando entre medias un espacio adecuado para poder moverse con facilidad. Es la opción por la que más se decantan los cocineros profesionales porque se reducen los traslados.

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Nos referimos por muebles suspendidos a aquellos que cuelgan de la pared y no tienen patas que les sirva de apoyo en el suelo. La tendencia de este tipo de muebles ha aumentado en los últimos años y se ha extendido a todas las habitaciones de la casa. Generalmente, es una tendencia vinculada a interiores modernos y minimalistas.

Una de las principales ventajas de este tipo de muebles es que puedes situarlos a la altura que más te convenga. No todas las personas medimos lo mismo, por lo que los muebles estandarizados no se adaptan a las necesidades de todas las personas. Poder colocar el mueble a la altura que desees hará que realices las tareas en la cocina de forma más cómoda.

Los muebles suspendidos ocupan lo mismo que un mueble con patas, pero dan la sensación de que la estancia es más amplia y está más despejada.  El no tener patas supone una ventaja tanto de almacenamiento como de limpieza al no tener las patas como obstáculos. Además, en las cocinas se acumula mucha suciedad que posiblemente nunca has podido limpiar porque tus armarios llegaban hasta el suelo.

Estos muebles son de gran utilidad para todas las estancias del hogar, en salones, dormitorios, baños, habitaciones e incluso en la cocina.

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